Memoria – Los Orígenes de Alien, que se estrenó en la categoría Medianoche del Sundance 2019, trata de la creación del clásico de ciencia ficción: Alien. Asistí a la proyección un viernes por la mañana… es cierto que no era medianoche… más bien una proyección tipo brunch. La película se sumerge en el ritmo, las imágenes, la cinematografía, el guión y ESA ESCENA EN PARTICULAR donde la criatura se toma el tren hacia “Sangrelandia” a bordo del “Expreso de la Cavidad Torácica”. Aquí un pequeño vistazo al documental que pretende revelar lo que convirtió a Alien en una pegajosa y parpadeante obra maestra de ciencia ficción, en la que siempre llueve dentro de los ambientes y el vapor está inexplicablemente en todas partes… Oh, un momento. Ridley Scott sí dio una explicación para eso. “Porque se veía bien”.
El documental del director Alexandre O. Philippe (78/52: Escena de la Regadera de Hitchcock) empieza, un poco como aquella clásica película, con un largo y errante plano secuencia por un pasillo de nave espacial de aspecto familiar, que termina en un horror indescriptible, uno que no develaré aquí. Este prólogo funciona como un gran gancho que se convierte en un ancla para todo el documental. (Los planos del pasillo junto con tomas de belleza del Templo de Delfos volverán a aparecer aquí y allá a lo largo de los 93 minutos del documental). Con un comienzo tan sorprendente, me preparaba para el tipo de documental cinematográfico que parece estar tan de moda, pero desde ese primer pasillo, pasamos a un formato estándar más tipo “Ken Burns” que sigue la estructura de actos de la película de 1979 (Fotos en movimiento cubriendo la voz en off y entrevistas con gente sentada).
Esta estructura estándar no es algo malo, ya que hay mucho que desentrañar en las imágenes que rodean el diseño de producción de Alien. Philippe trabaja arduamente para profundizar en todos los matices que hicieron que esta película prendiera como una garrapata. La garrapata, un arácnido que se alimenta de sangre, no debe confundirse con la avispa parásita – El escritor de Alien, Dan O’Bannon, aparentemente tenía una relación de amor/odio con insectos y parásitos de todo tipo.
Hay una tendencia en las películas de tipo “making of” a apoyarse demasiado en las imágenes del material guionado original y, afortunadamente, Alexandre O. Philippe trabaja creativamente para generar interesantes momentos de b-roll, tales como cortes a antiguas entrevistas de Ridley Scott, reproducidas en monitores que se verían de lo más normal en el Nostromo. De hecho, la película de Philippe es un homenaje adecuado a la franquicia original, desde los breves momentos escritos hasta la iluminación altamente contrastada de las entrevistas. Son puntos a favor para este fanático del estilo de tipografía color verde que había en las computadoras de la nave.
La verdadera razón para que busques este documental cuando ingrese en tu órbita, es el contenido central: la revelación de lo que inspiró el diseño de producción. Aprendemos cómo un guión de aproximadamente 30 páginas (originalmente llamado Memoria), se transformó en un icónico film de ciencia ficción que dio origen al diseño de una criatura verdaderamente aterradora, del maestro suizo de horrores del espacio: H.R. Giger. Los materiales originarios descritos en el documental son muchos como para mencionarlos aquí. Algunos pueden sorprenderte. La película de 1979 se inspira fuertemente en recursos como el artista Francis Bacon, Lovecraft, los egipcios y las Antiguas Erinias Griegas – Te ahorraré un paso. Aquí está la página de wikipedia de las Erinias. Disculpen las pesadillas.
La película evita mostrar las sagas menos estelares en el universo Alien y se ocupa principalmente de las películas dirigidas por Ridley Scott: Prometheus y Alien: Covenant. Por desgracia, Ridley no hace una aparición actual en “Memoria”, y eso es una lástima, dado que los cineastas le atribuyeron gran parte del mundo oscuro y sucio de la película original a Scott. Por suerte, la película hace uso de entrevistas más antiguas de Ridley Scott para llenar esos vacíos. Otra desafortunada omisión es Sigourney Weaver – que no aparece en las entrevistas al elenco, aparte de los clips bañados en su sangre y sudor de la película original. ¿Un documental de Alien sin Ripley? Aparecen actores que interpretaron personajes secundarios y terciarios, pero retratar a la heroína sin la mujer que le dio vida es una desilusión.
Alien es una de esas películas que se queda contigo a lo largo de los años, y no importa cuál sea tu grado de afición, estarás contento con Memoria, de Alexandre O. Philippe. No es espectacular, pero es gratificante.
Si eres como yo, el hecho de que este documental haya entrado a Sundance podría ponerte a pensar sobre qué obra maestra de algún cineasta podrías diseccionar de manera documental. ¿Qué película elegirías? ¡Comenta debajo!