La retroiluminación es uno de los términos que los aspirantes a cineastas aprenden al principio de su formación. Y no solo ellos. Hace poco escuché un podcast donde un invitado, experto en comunicación, les recomendaba a los oyentes instalar iluminación de tres puntos en las llamadas importantes de Zoom para destacar entre sus compañeros. Sin embargo, la retroiluminación en el cine va más allá de crear profundidad y separar los objetos en un encuadre. Se trata de una herramienta conocida que puede dirigir la atención del espectador, crear una atmósfera específica y enriquecer la historia. ¿De qué manera? Analicémoslo.
Como su nombre lo indica, la retroiluminación es una técnica de iluminación en la que se coloca una fuente de luz detrás de un sujeto, de frente a la cámara. Existen variaciones en esta configuración, ya que a veces la retroiluminación puede provenir ligeramente desde arriba, y otras veces se coloca a la altura de los ojos. Si se desplaza un poco hacia un lado, se convierte en un “kicker”, término que abordaremos más adelante. Pero el principio general se mantiene: los rayos de luz envuelven el objeto o sujeto desde atrás y se dirigen hacia la cámara.
¿Por qué usar contraluz?
¿Para qué sirve la contraluz? Para varias cosas. Sobre todo, al iluminar al sujeto desde atrás, crea un halo de luz que delinea sus bordes. Este contorno define la forma del sujeto y lo separa del fondo. En nuestro curso MZed “Introducción a la Iluminación”, el experimentado cineasta Ollie Kenchington demuestra lo poco que se necesita para marcar una gran diferencia.
Images source: Ollie Kenchington / MZed 
En este ejemplo, se puede observar cómo incluso un punto de contraluz de baja intensidad puede literalmente “eliminar” al participante. Aunque en la segunda imagen ya no lleva un chaleco claro, podemos distinguirlo fácilmente de las demás personas en la sala y del fondo. Por supuesto, también ayuda que haya una luz clave brillante que incide sobre su rostro, atrayendo nuestra atención hacia él. Sin embargo, la separación visual se produce gracias a la contraluz.
La luz crea profundidad en la imagen como parte de una configuración de iluminación de tres puntos. Ya hemos comentado que el cine y el vídeo son medios bidimensionales que suelen verse en pantallas planas, y por ello la luz es fundamental para darles forma a los objetos y sujetos en el cuadro, haciéndolos más realistas e inmersivos.
¿Dónde colocar la retroiluminación?
En una configuración clásica de iluminación de tres puntos para entrevistas, Ollie Kenchington sugiere colocar la retroiluminación casi directamente detrás y ligeramente por encima del sujeto. Eso sí, no demasiado alta, ya que podría extenderse sobre la frente o incluso rozar la nariz. Además, si el protagonista es calvo, hay que tener cuidado con los reflejos.
Al mover la retroiluminación hacia un lado, se convierte en algo que Ollie llama “kicker” que ocurre cuando hay una luz de tres cuartos que ilumina desde atrás. En algún momento, el kicker puede empezar a extenderse por la cara, y debes tener en cuenta que hay escenas en las que lo necesitas y otras en las que no.
Estas no son reglas inamovibles, sino un enfoque clásico en cuanto a retroiluminación. Pero como todos sabemos, las reglas están para romperlas. Una vez que dejamos de lado la idea de la iluminación de tres puntos, empiezan a suceder cosas interesantes. En concreto, la contraluz adquiere su propia voz narrativa en el cine.
Uso de la contraluz en el cine para contar historias
La idea de que la luz tiene su propio poder narrativo no es nueva (haz clic aquí si quieres leer más sobre ello). A veces, la luz puede convertirse en un personaje. Un gran ejemplo de ello es la película “Sunshine” con Cillian Murphy, pero es algo metafórico. En su lugar, veamos una escena concreta de “Close Encounters of the Third Kind” de Spielberg. En el curso de MZed “El Lenguaje de la Iluminación”, el director de fotografía y educador Tal Lazar la presenta como un ejemplo de cómo los cineastas juegan con las expectativas del público.
Film stills from “Close Encounters of the Third Kind” by Steven Spielberg, 1977 
El electricista Roy Neary está sentado en su coche cuando un par de faros de luz se acercan a él por detrás en dos oportunidades. De repente, la fuente empieza a comportarse de forma extraña, se mueve hacia arriba y aumenta drásticamente la intensidad. Esa es la primera vez que Roy se encuentra con extraterrestres, es cuando comprende que está sucediendo algo sobrenatural. Y nosotros también. Sin criaturas, sin prótesis, sin efectos especiales. La historia se narra a través de la luz de fondo y su movimiento.
Otro ejemplo que me viene a la mente es la escena del nacimiento en la película de acción distópica “Children of Men“:
Mientras Kee da a luz a una niña, la tenue y parpadeante luz de fondo crea un resplandor sagrado, casi bíblico, alrededor de la recién nacida. Es solo una pequeña fuente práctica, pero podemos interpretar mucho de ella. El conocimiento común sugiere que esta pequeña luz detrás del bebé simboliza la esperanza en un mundo sombrío y refuerza el tema del renacimiento de la película.
Efectos dramáticos y siluetas
¿Qué pasaría si usáramos la luz de fondo como clave, eliminando todas las demás fuentes? Este enfoque crearía un alto contraste dramático, ¿verdad? Y cuando hablamos de contraste, no podemos evitar mencionar el término claroscuro.
La técnica de iluminación de claroscuro utiliza luz intensa y sombras profundas para crear drama, profundidad y misterio. Tomada de pintores renacentistas como Caravaggio, resalta ciertas zonas mientras sumerge otras en la oscuridad. En el cine, este efecto ayuda a crear tensión y hace que los personajes parezcan más intensos o misteriosos. Piensa en Batman emergiendo de las sombras: la luz de fondo oculta su rostro de nosotros y de los inadaptados, mientras que su silueta se ilumina dramáticamente.
A film still from “The Batman” by Matt Reeves, 2022 
El segundo ejemplo en las imagenes de arriba muestra cómo utiliza la luz de fondo el director de fotografía Roger Deakins en “The Assassination of Jesse James by the Coward Robert Ford“. ¿Qué sientes al ver esta toma simple pero intensa? ¿Suspenso, drama, quizás miedo? No reconocemos ninguna expresión facial de los personajes, pero la luz de fondo y el alto contraste nos hacen comprender inconscientemente que algo malo está sucediendo.
No es de extrañar que, en algún momento, fotografiar siluetas contra la intensa luz de fondo se convirtiera en un cliché visual para realzar el drama y la intensidad de la escena. Basta con mirar el duelo entre Luke Skywalker y Darth Vader de “Star Wars: The Empire Strikes Back.”
El sol como contraluz
¿Esto significa que como se ha convertido en un “cliché” deberíamos dejar de usar la contraluz de esta manera? No, no lo creo. Al fin y al cabo, siempre podemos disfrutar de la magia del atardecer, aunque el sol se oculte en el horizonte todos los días.
De hecho, esa es otra forma de conseguir una hermosa contraluz, usando el sol como fuente. Una película nominada al Oscar que recurre a esta técnica y es famosa por su cinematografía naturalista es “Nomadland.”
Si has visto la película, sabes que muchas de sus escenas se desarrollan en torno a los extremos del día: el amanecer y el atardecer. ¿Por qué? Porque es el tipo de luz natural que más nos agrada a la vista, pero también porque nos crea una inexplicable sensación de tristeza. Si quieres saber más sobre esto, hablamos en profundidad sobre las maravillas del enfoque naturalista de “Nomadland” en este artículo.
¿Dos contraluces en una sola configuración?
La convención cinematográfica moderna se centra en emular la luz. Esto significa que nuestra iluminación debe resultar lo más auténtica posible. Por ejemplo, si se aplica una luz de fondo intensa a la toma y luego se da un giro de 180° a un contraplano, la fuente anterior debería convertirse en una luz frontal. Ambos cuadros no pueden tener solo una luz de fondo, ya que no sería realista.
Bueno, al menos lógicamente hablando. En cuanto a la narrativa, tengo mis dudas. Hay una escena fascinante en la última película de Robert Eggers, “Nosferatu”, que rompe esta lógica y la abandona por completo.
Film stills from “Nosferatu” by Robert Eggers, 2024 
En primer lugar, se trata de una película sobre un vampiro famoso, por lo que no tiene por qué obedecer a las leyes de nuestra realidad. En segundo lugar, esta escena tiene un aire onírico. Como explica el director de fotografía Jarin Blaschke, querían crear un momento arquetípico de “encuentro con el diablo en la encrucijada”, y simplemente no funcionaría si usaran algo más que la luz de fondo de contraste y la luz de la luna. Por último, pero no por ello menos importante, tanto el plano como el contraplano se ven increíbles. Te ponen la piel de gallina, sobre todo al ver esta escena en una gran pantalla de cine. ¿No es esa una de las razones por las que nos encantan las películas? ¿Por la experiencia visceral?
Así que, la contraluz en el cine no solo es una parte vital del esquema clásico de iluminación de tres puntos, ¡es mucho más que eso! ¿Cuáles son tus ejemplos favoritos de su uso? ¿Cómo juegas con la contraluz en tus proyectos? ¡Hablaremos más al respecto en los comentarios!
Fuente de la imagen principal: fotogramas combinados de “Children of Men” de Alfonso Cuarón, 2006; “The Batman” de Matt Reeves, 2022; y “Star Wars: Episode V – The Empire Strikes Back” de Irvin Kershner, 1980.
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